Explicación del CPC (coste por clic)

Es importante que las marcas midan sus métricas de marketing digital, incluida la comparación del CPC con el CPM (coste por mil o el coste por cada 1000 impresiones de los anuncios). La ratio de clics (CTR) de un anuncio, página de destino o artículo es el número de clics que recibe para ir a otra página. El CPC se basa en la cantidad de clics reales que recibe el anuncio, mientras que el CPM se basa en la cantidad de veces que se ve un anuncio, independientemente de si los clientes hacen clic en él o no. Las marcas pueden utilizar ambas métricas, teniendo en cuenta las implicaciones de cada una, para obtener una visión más completa del rendimiento de sus campañas publicitarias.

El CPC es el importe medio que se paga por cada clic que se ha hecho en un anuncio. Un número elevado de clics o visitas en un anuncio significa que el anuncio está atrayendo la atención de los clientes. Varios anunciantes pueden pujar por el emplazamiento de anuncios en sitios web y palabras clave populares, por lo que el CPC óptimo de cada marca lo determina el posicionamiento de sus anuncios, así como el posicionamiento de otras marcas y productos relacionados. Cuanto más demandada esté una palabra clave en la subasta y cuanto mayor sea el emplazamiento del anuncio, mayores serán los costes de publicidad.

El coste medio por clic es sencillo: Es el importe medio que se gasta en cada clic de un anuncio. Por lo general, los anuncios colocados en las páginas de los motores de búsqueda cuestan más que los anuncios colocados en el sitio web de una marca. El posicionamiento de los anuncios cambia con frecuencia, por lo que no habrá un número establecido para el CPC del anuncio de una marca.

El coste por clic máximo es una puja de una marca por el emplazamiento de anuncios y palabras clave, lo que significa que es el precio más alto que están dispuestos a pagar. Sin embargo, afortunadamente, la marca normalmente no pagará el coste por clic máximo al completo. Según las marcas relacionadas y las puntuaciones de calidad en las búsquedas, el CPC real suele ser inferior a la puja inicial.

Una vez que una marca decide su coste por clic máximo, debe decidir si quiere utilizar la puja manual de coste por clic o la puja automática de coste por clic. La puja manual de coste por clic significa que la marca elige sus propios importes individuales de puja. Para una opción más automática, las marcas pueden utilizar en su lugar las pujas de coste por clic mejoradas.

Una opción alternativa a las pujas de coste por clic manuales son las pujas de coste por clic mejoradas, en las que la marca establece su presupuesto general y, a continuación, automatiza sus pujas en función de ello. Las pujas de coste por clic mejoradas son una función que se ha añadido a motores de búsqueda como Google AdWords y Microsoft Bing. Sponsored Display utiliza las pujas automáticas para ajustar la puja en función de la conversión.

Hay ventajas e inconvenientes en la publicidad de PPC, que se mide con el CPC y el CPM: El CPC se correlaciona más directamente con las compras realizadas por los clientes, mientras que el CPM podría ayudar a alcanzar el objetivo de aumentar la conciencia de marca. Esto a menudo dará como resultado que la publicidad de CPC tendrá un precio más alto, pero también será más valiosa para llevar a los clientes al siguiente paso en su proceso de compra, ya que el CPC está directamente relacionado con el índice de clics (CTR) de los clientes que han visto los anuncios.

El objetivo de todas las marcas debe ser tener un CPC bajo. Esto significa que los anuncios deben tener optimización para conseguir un alto valor a un bajo coste. Además, el CPC debe ser proporcional a los beneficios generales de las marcas, ya que el objetivo final del CPC es impulsar las ventas. La mayoría de las marcas no quieren gastar más en anuncios de lo que suponen sus ingresos, por lo que la elaboración de un presupuesto puede ser crucial.